Navidad Verde: cómo celebrar sin contaminar y cuidar el planeta este diciembre
El consumo y la producción no sostenibles agravan ‘triple crisis planetaria’: cambio climático, pérdida de biodiversidad y contaminación.
Estudios de comportamiento a lo largo de los años han demostrado que, durante las festividades de fin de año, el consumo aumenta, elevando también la contaminación, la producción de residuos y el desperdicio de alimentos.
El consumo de energía también sube. En diciembre del 2024 aumentó 0.25% respecto almismo mes de 2023, de acuerdo con XM, operador del Sistema Energético Nacional.
¿Cómo reducir esos impactos?
Hay acciones simples como apagar las luces de los decorados navideños cuando no se está en casa, desconectar los aparatos electrónicos que no utilice y tomar duchas de corta duración.
Disfrutar y celebrar esta temporada no debe reñir con el cuidado de la naturaleza. La organización internacional dedicada a la conservación y el medio ambiente WWF entrega recomendaciones para una Navidad Verde, en la que las personas vivan las festividades con un menor impacto sobre el planeta.
“En Colombia asociamos la Navidad con la generosidad, demostrar nuestro cariño con regalos y abundancia en la comida. Sin embargo, a lo largo del tiempo estas emociones han derivado en un consumo excesivo que impacta de manera negativa al planeta. Navidad no debe ser sinónimo de desperdicio y derroche para mantener el espíritu de celebración. Tampoco se trata de ‘cancelar’ la Navidad; al contrario, deberíamos ‘hackear’ esta lógica de consumo y reemplazarla por creatividad y consciencia para disfrutarla mientras nos cuidamos y cuidamos la naturaleza”, señaló Ferney Díaz, coordinador de Prácticas y Consumo Sostenible de WWF Colombia.
1. Más empaque no significa mayor valor
Reutilizar empaques, usar papel periódico, o simplemente no empacar lo que no es necesario es válido. Los regalos no deben agravar las crisis ambientales del planeta.
Comprar teniendo presente la durabilidad y utilidad, apoyando la producción local y sostenible, es el camino.
El empaque para regalos puede tener impacto directo sobre el medioambiente. De un árbol que tarda entre 10 y 12 años en crecer se producen alrededor de 893 pliegos de papel regalo y por cada pliego se necesitan aproximadamente 10 litros de agua, además de elementos dañinos para los ecosistemas, como cloro y peróxido de hidrógeno. ¿Cuánto dura ese papel regalo antes de romperlo y botarlo? ¡Segundos!
Existen varias alternativas al papel regalo, como el papel periódico, reutilizar papel de talleres y tareas escolares, reutilizar las bolsas de papel de los mercados o decorar los regalos con figuras de origami en vez de cintas y moños. O acostumbrarse a no empacar algo que ya viene empacado.
2. Dar y recibir regalos con propósito
Cada regalo tiene una historia. Desde WWF Colombia apoyan iniciativas para fortalecer comunidades, preservar culturas y proteger la naturaleza. Este portafolio reúne emprendimientos que transforman tradición, creatividad y compromiso ambiental en productos con propósito.
Son elaborados de forma sostenible por personas que le apuestan a la conservación y que incluye alimentos como miel, café y diferentes tipos de artesanías.
También puede donar a los procesos de conservación que apoya WWF Colombia. En Panda Market, de forma segura, puede adoptar simbólicamente una especie, hacer una contribución mensual a nuestra labor o llevar al panda a través de distintas colecciones.
3. Decoración: sin plásticos y con más usos
La decoración de Navidad puede ser libre de plásticos. Según ONU Medio Ambiente, se usan 5 billones de bolsas plásticas al año, muchas de ellas asociadas a compras. La mayoría termina en la naturaleza.
Optar por materiales y ornamentos que puedan reutilizarse por varios años son la mejor alternativa. Tenga en cuenta que la calidad y el tiempo de uso son la clave para que la decoración no termine en la basura en enero.
La Plataforma Nacional de Acción sobre los Plásticos, de la cual hace parte WWF, presentó un estudio sobre alternativas a los plásticos convencionales. Si bien existen materiales biocompostables que reducen la contaminación por plásticos, la principal recomendación es optar por reducir el consumo y usar materiales reutilizables y reciclables.
4. Cocinar de forma consciente
WFF invita a renovar la frase de ‘mejor que sobre y no que falte’. “La clave está en comprar solo lo que va a cocinar, cocinar solo lo que va a servir, servir solo lo que va a comer. Lo que no se comas, guardarlo para después o compartirlo”, indica la organización.
La producción de alimentos utiliza el 40% de la tierra disponible e impulsa la deforestación y la conversión de ecosistemas naturales, la pérdida de biodiversidad y la erosión del suelo. Y hoy, 4 de cada 10 alimentos que se producen nunca llegan a consumirse.
De acuerdo con FAO, los alimentos producidos y no consumidos son responsables de 3.300 millones de toneladas de gases de efecto invernadero.
5. Una firma a la Amazonía
La Amazonía se acerca peligrosamente a un punto de no retorno. En medio de esta crisis socioambiental, un grupo de organizaciones ambientales y científicas se unieron para crear Amazon League, una campaña global que busca movilizar a la sociedad civil y presentar una petición a los líderes del mundo, exigiendo acciones concretas para detener el colapso de la Amazonia y la protección de los demás bosques tropicales del planeta. Esta Navidad, puede darle un regalo a la Amazonía: el compromiso con su cuidado y protección. Firme la petición en: www.amazonleague.org
Haga clic aquí y encuentre más información de LA PATRIA.
Síganos en Facebook, Instagram, YouTube, X, Spotify, TikTok y en nuestro canal de WhatsApp, para que reciba noticias de última hora y más contenidos.