Condenados por hurto, homicidio y amenazas buscan preacuerdo por intimidar a mujer embarazada en Manizales
                    Alejandro, Ramírez y Daniel, capturados el 7 de julio del 2024 por amenazar a una mujer en la invasión Alto del Guamo, de Manizales, esperan llegar a un acuerdo con su víctima y recibir un beneficio de la justicia. El cuarto, identificado como Tavo, asegura que no tiene nada que ver.
La defensa de los procesados le manifestó al Juzgado Sexto Penal del Circuito de Manizales la intención de lograr un preacuerdo o un principio de oportunidad con la Fiscalía, lo que implica el pago de una indemnización a la afectada.
Ante dicha manifestación, el juez optó por dar un tiempo hasta el próximo 5 de diciembre, también con la intención de que los sujetos recojan el dinero exigido por la afectada.
Se creen los dueños de la invasión
El día de los hechos, la Policía recibió una llamada en la que se advertía sobre cuatro sujetos que estaban armados con machetes e intimidaban a una mujer y a su madre, dentro de su residencia, cerca de la cancha de tejo de la invasión, en el norte de Manizales.
Al parecer, disputas por microtráfico y fronteras territoriales para el expendio desencadenaron en las amenazas. A la llegada de los agentes, los sujetos se negaron a bajar sus armas, se mostraron desafiantes y debieron reducirlos.
La Fiscalía les imputó cargos por intimidación o amenaza con arma de fuego; armas, elementos o dispositivos menos letales; armas de fuego hechizas; y arma blanca. No aceptaron y solo a Tavo lo enviaron a la cárcel.
Problemas viejos
Las víctimas, una de ellas en embarazo, narraron luego de la detención de los hombres, que estos les metían terror constantemente. Incluso delante de la autoridad, les dijeron que iban a quedar libres y la buscarían para picarlas por sapas.
Sobre las armas de fuego que esgrimieron supuestamente Tavo y su combo, se supo que otras personas les habrían colaborado y las escondieron. A él lo señalan de ser problemático y querer ejercer su autoridad en la invasión.
Un prontuario nutrido
Tavo recibió el pasado 19 de septiembre una condena por preacuerdo, de 10 años y 7 meses, por homicidio agravado y porte ilegal de armas de fuego, cuya víctima fue Julián David Quintero Marín.
Tiene tres de 4 años y 6 meses por tráfico de estupefacientes, 1 año y 6 meses por hurto calificado y agravado, y 5 años y 4 meses por tráfico de estupefacientes.
Ramírez presenta 2: de 1 año y 3 meses por hurto calificado y agravado, y de 7 años y 10 meses por porte ilegal de armas de fuego.
Daniel tiene 4: 1 año por hurto calificado, 2 años y 6 meses por amenazas, 3 años y 6 meses por violencia contra servidor público, 4 años y 1 mes por hurto calificado y agravado.
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