
Manizales: adiós a las casas de siempre en la avenida Paralela con calle 51, vea fotos del ayer y el mañana

La transformación urbana sigue avanzando en Manizales. En la calle 51 con avenida Paralela, en el límite entre los barrios La Arboleda y Versalles, el panorama ha cambiado por completo en los últimos días.
La última casa que quedaba en pie, una construcción esquinera, fue demolida para dar paso a un nuevo proyecto de vivienda.
En su lugar, se construirá un conjunto de dos torres de apartamentos, como parte del proceso de densificación urbana contemplado en el Plan de Ordenamiento Territorial (POT) desde el 2017.
Este plan busca fomentar las edificaciones verticales para aprovechar el espacio en una ciudad marcada por su topografía compleja.
El arquitecto José Wilmar Jaramillo, residente del sector desde hace 25 años, recuerda que muchas de esas casas, aunque parecían de un solo piso desde la avenida, en realidad tenían hasta tres niveles hacia la calle 53, debido a la pendiente del terreno. “Eran viviendas antiguas, parte de la historia del barrio, aunque no todas tuvieran valor arquitectónico”, explica.
Una excepción fue la casa roja, ubicada en la calle 53 #25-34, construida hace 95 años por Quintiliano Villegas, maestro de obra de la Catedral.
Allí funcionó durante más de seis décadas un salón de belleza atendido por la familia Aranzazu, con clientas como la exgobernadora Pilar Villegas y Luz Marina Zuluaga, Miss Universo 1958. Hoy, esa memoria también fue arrasada por la retroexcavadora.
“El cambio es inevitable. La ciudad es un ser vivo que crece y se transforma”, concluye Jaramillo.
Estas viviendas, visibles en la aplicación Street View desde el 2012, ya no existen en el 2025. Por estos días se da inicio a la construcción de nuevos edificios.
Carlos Eduardo Sanabria Aranzazu, nieto de los primeros propietarios, recuerda: “La casa roja fue construida con guadua traída desde el corregimiento de Arauca. Siempre conservó su techo de teja de barro. Tenía siete habitaciones, una gran terraza y unos bajos. Mis tías atendieron el salón durante 65 años. María Elena arreglaba el cabello, y Martha y Ruby hacían las uñas".
Las casas demolidas albergaban cinco apartamentos, un anticuario, un hogar de ancianos y una peluquería, entre otros negocios.
Una de las viviendas, de color terracota y contigua al gimnasio de Confa, fue habitada por la dueña del anticuario. En sus últimos años, sufrió robos, abandono y deterioro. Los muebles del antiguo anticuario terminaron abandonados en un lote baldío, comentan los vecinos del sector.
Haga clic aquí y encuentre más información de LA PATRIA.
Síganos en Facebook, Instagram, YouTube, X, Spotify, TikTok y nuestro canal de WhatsApp, para que reciba noticias de última hora y más contenidos.